Ni petardos, ni bocinas de coche ni ningún ruido estridente perturba el sueño y la tranquilidad de la Naruleta... ¿nada?.... mmmmm...... NOOOOOO....
Surgió de pronto, cada vez que suena un interfono o el timbre de casa, el pobre animalito se vuelve loca!!!! aúlla, ladra, llora.... mueve su muñón de colilla y se dirige como una flecha hacía la puerta.
Ni el mismísimo Iker Jiménez podría dar una explicación al comportamiento de la Naru... yo aventuro a especular que lo hace porque lo asocia con las visitas y se vuelve loca al imaginar posibles mimitos... ji,ji...
La verdad es que está de chiste la pobre...
Nada, que la Naruleti es adicta a los mismos... como su mami....
4 comentarios:
A lo mejor vuestro interfono emite ultrasonidos excitantes para Naru... es broma, me gusta más vuestra teoría!
Mi chulin hace igual! creo que lo asocian a visitas. Y visita lo asocian a tumbarse boca arriba y obteber un rascado de pancha
Es curioso como con tan poquita cosa, estos animalillos se vuelven loquillos de alegría!
Aunque... también saltan como fieras cuando se les acerca algún premio o chuchería de perro...
A lo mejor es que asocia el timbre con el timbre de mi voz???? Jijiji... podría ser no????
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